Como parte del Reto Verde 2021, la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema) puso en marcha la iniciativa Barda Viva; a través de la cual, se pretende plantar 30,000 enredaderas, equivalentes a 10 kilómetros, en diferentes espacios de la metrópoli.

Marina Robles García, titular de la Sedema, explicó que el objetivo de esta iniciativa es poder usar espacios como muros y bardas para reverdecer la ciudad. Además, es una alternativa para sitios donde no es sencillo plantar árboles.

Entre nubes, en medio de la montaña y bajo la lluvia, los brigadistas de San Miguel Topilejo trabajan en la recuperación de los bosques.

“Falta mucho camino por recorrer, toda vez que nuestro territorio está constantemente afectado por factores externos como el saqueo de recursos forestales, principal de ellos la tala clandestina”.

Marcos Báez Miranda, presidente de Bienes Comunales de San Miguel Topilejo

Cubiertos con sus impermeables amarillos, los comuneros y ejidatarios forman parte del programa Altépetl, que inició en la alcaldía de Tlalpan, y está a cargo Secretaria de Medio Ambiente capitalina.

Con la meta de plantar 30 mil enredaderas, equivalentes a 10 kilómetros lineales, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) arrancó con el Reto Verde 2021, a través del proyecto “Barda Viva”, en la estación del Metrobús Nicolás Bravo, en la colonia Tepalcates, alcaldía Iztapalapa.

“Una barda viva es un sistema accesible para enverdecer la Ciudad de México, consiste en colocar especies trepadoras y enredaderas en muros y bardas. Estas bardas proporcionarán servicios ambientales, reducirán el calor, el ruido y beneficiarán a la fauna polinizadora“, detalló la dependencia en un comunicado.

Con 250 mil árboles frutales cultivados en viveros de la Ciudad y distribuidos entre los capitalinos para sembrarlos al interior de las casas o en banquetas, busca combatirse la plaga del muérdago, expuso la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema).

"De 3.3 millones de árboles que hay aproximadamente en la Ciudad, 30 por ciento está afectado por el muérdago", explicó el director de Regulación de Áreas Verdes, Isidro Recillas.

La Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema) a través de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (Corendar), inició ayer el Reto Verde 2021 con el objetivo de incrementar a 10 millones de plantas en el Suelo de Conservación de la CDMX.

Se planea que esta jornada de revegetación consiga su misión el 31 de agosto, con la participación de pequeños propietarios, ejidos, comunidades y el apoyo de 3 mil 600 brigadistas pertenecientes al programa Altepetl.

Para incrementar la cubierta vegetal en el suelo de conservación de la CDMX mediante la revegetación, así como impedir que las áreas se degraden, la Secretaría del Medio Ambiente capitalina (Sedema) inició ayer el Reto Verde 2021.

La dependencia informó que esta revegetación, llevada a cabo por la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural y que culminará el próximo 31 de agosto, será posible con la participación de pequeños propietarios, ejidos y comunidades, así como con el trabajo de tres mil 600 brigadistas del programa Altepetl, quienes realizarán labores de preparación de terrenos y se incorporarán a jornadas de reforestación en parajes afectados por incendios y talas clandestinas, para cumplir con la meta de sembrar en dos meses 10 millones de árboles y plantas en suelo de conservación.

El compromiso de la población de Tláhuac por sumarse al Reto Verde mediante acciones que contribuyan al cuidado y la conservación del medio ambiente, es un asunto que nos llena de satisfacción, ya que estos sitios no solo representan sustentabilidad, también forman parte de la historia de la demarcación, señaló Rigoberto Salgado Vázquez, diputado del Congreso de la Ciudad de México.

Al encabezar la Jornada de Reforestación ‘Sembramos Futuro’ en el Pueblo de San Andrés Mixquic, uno de los más emblemáticos de Tláhuac, el legislador sostuvo que esta demarcación mantiene suelo de conservación y zonas rurales donde se producen diversos alimentos, además de ser el hogar de diversas especies de flora y fauna, esenciales para mantener el equilibrio ecológico de la Ciudad de México.